Motivar es mejor que presionar

Ejercer la presión sobre otros, es algo que se ve a menudo en nuestra sociedad. Hay muchas formas de presión. Una de ellas es la del estudiante, o la del que trabaja en algún lugar. Normalmente el que presiona suele ser una persona que por su cargo llega a representar un papel, que normalmente haya sido encargado por otro de más arriba, o no. Al estudiante no hay que presionarlo, sino motivarlo, para que de todo lo que tenga o que voluntariamente quiera dar. ¿Que es eso de "exprimir" a la persona? ¿Que es eso, de amenazar a alguien para "obligarle" a lograr unos objetivos que otro busca para ti.?

El chantaje emocional tampoco es un camino honrado. Tratar a los estudiantes o trabajadores como si fueran súbditos o esclavos, con la amenaza de que si no dan "el nivel" otro vendrá a por tu puesto, o serás un fracaso en la vida.

El camino correcto para vivir en paz es "no tratar al otro como no te gustaría ser tratado a ti". Por tanto, a los jefes y los que tienen alguna posición de autoridad en el mundo laboral o estudiantil me dirijo hoy. Tratad a las personas con el respeto y la dignidad que se merecen. Para ello, os invito, caso de que os sea complicado, mirar como ejemplo, la figura de Jesús de Nazaret, el Hijo de Dios, el Mesías y Salvador. Acercaos a el, y el os ayudará a tratar a los demás como se debe. De lo contrario, algún día sufriréis también vosotros en vuestras carnes lo que se siente, si no aquí, allí. Arrepentirse y volver a empezar, Dios os acoge con los brazos abiertos. Sed honrados.

A los que estáis cargados y agobiados por el peso de los que os presionan os digo: Acercaos igualmente a Jesús, el os ayudará a llevar la carga.